PETROLEROS CAVÓ HONDO EL POZO, 4-0

Petroleros de Poza Rica dieron un paso más hacia la liguilla  del Grupo II de la Tercera División del futbol profesional al superar 4-0 a Chileros en tarde de goles en el estadio Quirasco.

Las anotaciones del conjunto visitante, en el juego perteneciente a la fecha 23,  fueron obra de Jared Solís,  Franc Vermejo, Víctor García y Ronaldo Mellado.

Con este resultado Poza Rica llegó a 42 unidades, ocupando el sexto lugar de la tabla, mientras que Chileros  continúa sin usar la sumadora al permanecer en 18 puntos.

SERGIO Hernández estuvo incisivo los primeros minutos del juego, luego la zaga petrolera ajustó espacios y complicó la labor del xalapeño.

En la próxima jornada Chileros se presentará en “El Rosario” para enfrentar a Real San Cosme, mientras que Petroleros estará en casa para enfrentar a Delfines UGM en duelo importantísimo para ambos equipos  que están inmersos en la lucha por la calificación.

EL JUEGO

Chileros mostró capacidad física y llegada en la primera parte  e incluso estuvo cerca de tomar ventaja en el marcador, pero Luis “Pijije” Moreno  desperdició una opción inmejorable al llegar a las barbas del arquero  y mandar el balón  por encima del arco.

Tras el susto, Poza Rica empezó a plantarse en la cancha y,  en un error de la zaga xalapeña,  Solís sacó un potente zapatazo que hizo que el balón hiciera una parábola que impidió la desviada del arquero Rafael Poceros.

RAFA Poceros (arquero) y Manuel Carbajal «enfrían» una llegada de los visitantes.

Chileros insistió con Gerardo Sánchez como orquestador, teniendo en las bandas a Sergio Hernández y a Rey Vázquez. «Yoyito» Cortés  se vio insistente, participativo , lo mismo que  Wady Farid, Manuel Carvajal y Johann Hernández.

Luis Morales se vio mejor  que en otros partidos, aunque le faltó gas para mantener la intensidad al igual que  Jorge Domínguez.  

Por el centro Moreno inquietaba, pero no pudo superar la bien escalonada zaga petrolera.

Fue entonces que en otra desconcentración Vermejo marcó el 2-0 para dar una ventaja sólida a su equipo y así irse a los vestidores.

En la parte complementaria  las cosas empeoraron para los de casa cuando García marcó el tercer tanto.

LA TUVO «Pijije» Moreno, pero le pegó muy abajo al balón y lo mandó por encima del arco.

Entonces Chileros ya no tuvo argumentos para hacer algo más, primero porque  bajó la intensidad de juego y segundo porque desperdició las pocas oportunidades que tuvo de anotar.

La cuarta anotación  fue obra de Mellado quien, con excelente técnica, recibió el balón desde la banda para “matarlo” y dirigirlo a centímetros para luego tocar por el costado de Poceros para el 4-0 definitivo.

LUZ Y SOMBRA

Aceptable labor del árbitro central Oliver Hernández, con Jesús Valdéz y Alejandro Hernández en las bandas.

Detalles como el sólo reponer dos minutos al primer tiempo cuando hubo al menos tres lesionados quienes  requirieron atención del médico de plaza Gamaliel Albarrán, además de otra simplezas  con las que mostraron o quisieron mostrar protagonismo –sólo hubo pérdida de más tiempo– como el exigir  que elementos de la prensa se pusieran la casaca.

Lo que no se dio cuenta Oliver es que sólo hubo dos  baloneros  en el entorno del terreno de juego, además de que  el partido empezó retrasado, así como  el segundo tiempo.

Además,  cuando el juego había terminado se suscitaron reclamos e insultos entre  elementos  del cuerpo técnico sin que las cosas pasaran a los golpes.

LUIS Morales no dejó de luchar y de insistir en el desborde. Generó buen juego como delantero flotante.

Si bien la actitud del cuerpo arbitral debe ser la de pacificar, no deben meterse a los empujones y a los jaloneos como sucedió con la tripleta en cuestión. Su labor en esas situaciones es la de observar y anotar lo que sucede de manera callada y a distancia y no meterse entre las “patas de los caballos” alegando y tratando de arreglar las cosas como si fuera en un pleito de cantina.

Tal vez se les olvido a los nazarenos que pueden prevenir que las cosas no lleguen a mayores, pero  en el juego activo y no cuando ya ha terminado.

En fin, es de esperarse que esos “pequeños grandes detalles” no pasen desapercibidos porque son un grito a los cuatro vientos de que  el arbitraje de Tercera División, salvo honrosas excepciones,  es pueblerino.