Entre gritos de “sí se puede” y porras compañeros de Alexander Martínez Gómez le brindaron una despedida muy especial.
En una cancha el féretro con los restos del joven de 16 años fue puesto frete a la portería y, tras una “pared”, el balón rebotó con la suficiente fuerza para superar el lance del portero convirtiéndose en el último gol de Alexander en esta vida mortal.
La imagen ha causado honda tristeza entre propios y extraños y aún más cuando los jóvenes acompañantes se lanzaron sobre el ataúd para abrazarlo y derraman lágrimas por su amigo.
El hecho se suscitó en Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca donde Alexander murió de un balazo por parte de policías municipales que lo confundieron con un delincuente, según arrojan las primeras investigaciones.
Alexander jugaba para los Académicos de la Universidad del Golfo de México (Orizaba, Veracruz), equipo del grupo 2 de la Liga TDO (Tercera División Profesional).
A decir de propios y extraños, Alexander era un tipo limpio, tranquilo, excelente estudiante que alcanzaba, por su rendimiento, una beca del 90 por ciento.
Fuentes extraoficiales indicaron que la Liga TDP aportará un recurso económico destinado a poyar a los familiares de jugadores lesionados y los que pierden la vida.
Se espera en que las próximas horas, la Liga TDP informe en su página oficial datos más precisos sobre la entrega del recurso económico que seguramente será recibido por la madre del ex jugador, Virginia Gómez Pérez.