La bicampeona paralímpica organiza su aganda para no descuidar sus entrenamientos
ni su trabajo en el IVD; estará fuera el tiempo justo y confía en su equipo de colaboradores
Por FRANCISCO ALVARADO
Del 13 al 23 de julio, María de los Ángeles Ortiz vestirá nuevamente el uniforme de México, en lo que será el Campeonato Mundial Paralímpico “Londres 2017”.
No sabemos si usará la indumentaria oscura o la roja, o si convocará vía redes sociales a que sus seguidores voten por un color u otro, como lo hizo previo a los Paralímpicos de Río de Janeiro.
Es un hecho que, en la justa londinense, la plusmarquista será una de las favoritas para ganar el oro en la especialidad de lanzamiento de peso.
El «Big Ben» y la metrópolis londinense le traerán buenos recuerdos a la actual directora del Instituto Veracruzano del Deporte ya que fue ahí donde también ganó el oro paralímpico hace cinco años.
Este será su regreso al plano internacional tras seis meses de ausencia. Su última actuación de alto nivel fue en los pasados Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro.
¿Difícil combinar la dirección del IVD y tu actividad competitiva?
“Es una tarea diferente. Entreno muy temprano y me sirve para activar mi día, mantenerme en forma y al mismo tiempo desestresarme.
“Estoy aprendiendo mucho y muy rápido de la administración deportiva porque estoy en mi tema, el deporte, que es lo que me apasiona. El acercamiento con quienes de verdad tienen la necesidad real de practicar deporte.
No programé eventos de fogueos internacionales, ni invitaciones ni Grand Prix precisamente por el cumplimiento de mi deber, por mi sentido de responsabilidad”.
Ángeles Ortiz, directora del IVD
“La parte del deporte social me mueve mucho. Trato de equilibrar mi vocación deportiva que me apasiona para no descuidar mis entrenamientos y mi trabajo, aunque me está fallando un poquitín la parte del descanso”.
¿El tiempo de ausencia para ir a competencias estaría buen cubierto por tu equipo de trabajo?
“Mi ausencia será mínima. Sólo en competencias mayores y preselectivo oficial y sólo por el tiempo justo.
“No programé eventos de fogueos internacionales, ni invitaciones ni Grand Prix precisamente por el cumplimiento de mi deber, por mi sentido de responsabilidad.
“Tengo un compromiso con el Estado de Veracruz y con el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares sobre todo con el deporte veracruzano, así que debo cumplir y dar lo mejor de mí. Veracruz no merece menos.
Cuando aceptaste el cargo en el IVD fue con la condición de que te permitieran ausentarte para seguir compitiendo… ¿no es así?
“Como deportista tengo un compromiso con México y debo cumplirle a mi país por ello continúo preparándome en mis tiempos personales y asistiré sólo a mi selectivo dentro del país que marca Conade y de allí directo a Londres en el mes de julio cuando ya pasó la Olimpiada Nacional y nos tocan vacaciones”.
PARTE SOCIAL RURAL
“El señor gobernador, así como Miguel Ángel Yunez Márquez, al inicio de mi gestión, platicaron conmigo exponiéndome su preocupación por lo que sucedía en el deporte veracruzano.
“Ellos ya tenían una radiografía de cómo se encontraba el deporte, el declive del mismo por más que se quisiera maquillar al encontrarse poco desarrollo a lo largo de años; pero sobre todo al tener ellos acercamiento en la parte social rural y comunitaria vulnerable, es allí donde me piden que piense en algo. Me doy a la tarea de visitar las 8 regiones del Estado y algunos municipios extra, e ir asistiendo a algunas competencias municipales y regionales en diferentes sedes no muy comunes, para irme acercando directamente y encontré cosas muy interesantes muy enfocadas a la idea del proyecto que ya estábamos trabajando y que presentamos a la ENED y a Conade para su aval.
¿Tus colaboradores?
“Por mi parte cada día le imprimo mi mejor esfuerzo y actitud para que el deporte de Veracruz pueda resurgir; tengo un equipo de colaboradores muy trabajadores y muy entusiastas proactivos y con ganas de remar con transparencia y sinergia hacia el rumbo que dirige el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. A así que con ese capitán de barco, qué mejor timón”.