
Es pieza clave en la administración del equipo de futbol, además
de atender múltiples labores como madre, esposa y profesionista
Por FRANCISCO ALVARADO
No deja de sorprendernos la vitalidad y precisión con las que muchas mujeres se desempeñan profesionalmente.
A eso hay que aunarles la enorme capacidad para resolver su tarea en casa y en asuntos personales.
La prioridad de Lizbeth Yadira Gómez se reparte en diferentes ángulos. Uno de ellos es el futbol.
Tarea hay mucha en el FC Chileros, equipo que milita en la Tercera División y que dirige su esposo César Rubén Vázquez de la Torre.
Ella es madre de cuatro hijas, todas en edad de atención directa, escuelas, tareas, actividades dentro y fuera de casa y más.
Las labores del hogar y además la concentración que debe tener para estar al corriente de sus responsabilidades en el área administrativa del Cobaev, son el grueso de desafíos de la psicóloga Gómez Hernández.
El futbol es el eslabón que une a los Vázquez Gómez quienes saben de la importancia que es tener una familia estable, cimentada en vivir y practicar valores, formas de vida con metas elevadas.

¿Cómo le hace para repartirse en tantas partes?
“Estoy completamente segura, que cualquier mujer está preparada para afrontar varias actividades en la vida. Dios nos da la fortaleza la sabiduría para salir adelante y cumplir con nuestras responsabilidades como mujer, esposa y madre”.
¿Le gustaba el futbol antes de conocer a su esposo César Vázquez de la Torre?
“Lo escuchaba de niña, por mi hermano, pero no era algo preferido”.
¿Qué es lo más difícil para una mujer que está inmersa en el balompié como lo hace usted?
“Aceptar la derrota cuando se pierde, pero así es el futbol y el comprender que César le da todo el tiempo que puede a sus jugadores; sale de un trabajo a otro, casi siempre malpasándose y llegando tarde a casa”.
“Pero hay que seguir apoyándolo “.
¿Qué le deja entonces el futbol?
“Experiencias incomparables, que se disfrutan y te llenan de pasión”.
Un mensaje a las mujeres futbolistas, a las mamás y esposas de futbolistas a quienes no les gusta ese deporte, pero por solidaridad son la compañía y apoyo ideales para ellos.
“Que apoyen a sus esposos, hijos Que les hagan compañía. Es algo que nos desestreza y en realidad une a la familia”.