Un juego de selecciones nacionales cuando apenas las ligas están retomando su “sentido de ser” suena a buscar dinero a través de la tv, para que los patrocinadores calmen su urgencia de mostrarse en una transmisión internacional.
Pero eso y al margen de lo que significa el riesgo de lesionarse ante equipos rudos por naturaleza, la idea de “Tata” Martino es la de empezar a mover piezas.
Sin embargo y de todas maneras, sabe a poco un partido de este tipo, sin jugadores estelares –o más o menos estelares–, porque los mexicanos más “adelantados” están a miles de kilómetros, en España, Inglaterra, Holanda e Italia y sólo podrían juntarse en la fecha FIFA de octubre, para el duelo ante Holanda, en Ámsterdam.
Este partido será otra cosa, atractivo y necesario en un proceso que apenas inicia y que se espera culmine en Catar 2022.
Hablamos de los “españoles” Néstor Araujo, Andrés Guardado, Diego Lainez y Héctor Herrera. En Portugal, Jesús “Tecatito” Corona mientras que en Inglaterra figura Raúl Jiménez. En Italia, Hirving Lozano, sin dejar pasar al “holandés” Edson Álvarez.
A excepción de Lainez los demás tienen, como tatuaje, la titularidad en el equipo de Gerardo “Tata” Martino.
Los convocados para el juego del 30 de este mes suenan a prototipos de buenos jugadores. Son los indicados para cubrir plazas de los más pesados y competentes.
A excepción de algunos que juegan en la MX y que parecen infaltantes en el Tri como Ochoa, Talavera, el chamaco Luis Romo, JJ Macías y probablemente un par más, el resto es un buen “proyecto” a pesar de la experiencia o veteranía de algunos, pero que están debiendo en sus equipos por su poca continuidad o productividad.
En el plano “botanero” cualquier partido resulta “interesante” al calor de la plática, de las bromas entre cuates, de las siempre necesarias “exposiciones estratégicas” de quienes se convierten en técnicos, jueces implacables de jugadas y decisiones fallidas de los protagonistas.
Pero si se trata de decir “aquí estoy” y miren lo que hago”, “recuerden que hay una selección”, el conformar al Tri para enfrentar a un rival centroamericano que apenas reanudó su liga es igual que improvisar.
¿Por qué no un juego entre el Tri y una selección de jugadores extranjeros que militan en la Liga MX, o ante Pumas o León que juegan y dejan jugar, aunque no haya gente en la grada?.
Se trata de dar movilidad al equipo – ¿no?- antes de viajar a Europa para el juego ante los holandeses.
En el caso del juego ante Holanda –si no se cae de ultima hora– la convocatoria será muy diferente porque se jugará en Fecha FIFA, la primera de dos –la otra será en noviembre– que se programaron para lo que resta del 2020.