Jugando con 10 elementos todo el segundo tiempo México se impuso 2-1 a Argentina en cotejo de la fase de grupos de los Juegos Panamericanos de “Lima 2019”.
El choque se llevó a cabo en el estadio San Marcos de la capital peruana con la asistencia de poca, pero entusiasta acción de ambos seleccionados.
Con este resultado, el Tri que dirige Jaime Lozano llegó a 4 unidades, dejando a Argentina en 3, Panamá 2 y Colombia 1.
El próximo partido de México será ante el urgido Ecuador, el domingo 4 de agosto en el estadio San Marcos.
EL JUEGO
México arrancó el juego con José Hernández, Ismael Govea, Johan Vásquez, Aldo Cruz, Paolo Martín del Campo, José Godínez, Ulises Cardona, Pablo López, Francisco Venegas, José Esquivel, Brayton Vazquez.
Argentina eligió a Cambeses, Mosevich, Herrera, Vera, Novillo, Valenzuela, Gaich, Colombatto, Medina, Moreno y Urzi
Hubo dos penaltis marcados por el silbante peruano en favor del conjunto norteamericano. Concedió como falta dentro del área un recargón de Facundo Medina sobre Paolo Martín del Campo. Dudoso penal.
El encargado de ejecutar el tiro de castigo fue Francisco Venegas quien con potente envío superó la estirada del arquero argentino.
Con el 1-0 a favor México empezó a sentir mayor presión de la escuadra albiceleste. La media cancha sudamericana empezó a recuperar con mayor frecuencia la pelota y a generar más llegadas al arco del atlista Hernández.
Fue al minuto 38 cuando Adolfo Gaich recibió un balón dentro del área para percutir de aire y mandarlo al fondo de las redes. En la jugada se generó cierta falta sobre el zaguero mexicano que el árbitro no marcó.
En el 1-1 Argentina se dio ánimo para buscar la diferencia a su favor, pero todo quedó en aproximaciones.
Parecía que todo estaba listo para terminar la primera mitad sin más novedades, pero en un forcejeo cerca de la banda, el capitán Ismael Govea fue expulsado tras dar un manotazo en el rostro a Urzi.
La baja del zaguero pintó un panorama lúgubre para la escuadra azteca en la parte complementaria. Sin embargo el equipo tricolor mostró personalidad, primero en la marca con sus dos líneas defensivas y un delantero flotante según fuera la situación de juego.
Así empezó el desenlace. Argentina esperaba sólido atrás, con solvencia en su media cancha, pero con muchos problemas en los últimos treinta metros hacia el marco mexicano.
Hay que resaltar la actitud de los verdes, quienes mostraron estar en excelente estado físico. Aguantaron los embates y, antes de marcar el segundo gol, tuvieron un par de aproximaciones importantes, una de Godínez quien chorreó su disparo cuando tenía todo para sentencia y otra en una chilena de Paolo Martín del Campo quien exigió la estirada del portero Cambeses.
La jugada clave del juego se generó a los 78 minutos cuando Godínez hizo la «bicicleta», pisó el acelerador y sobre la línea fue derribado por Julio Mosevich decretándose el segundo penalti en favor del Tri.
Inmediatamente y con decisión Godínez tomó el balón y se dirigió al manchón penal. Al silbatazo, el atacante percutió hacia el lado izquierdo engañando al portero quien se había lanzado al lado contrario. De esta manera el delantero se sacó la espina que dejó clavado su error ante Panamá en la primera jornada cuando falló un penalti que le hubiera dado el triunfo a su equipo.
Con el 2-1 México se paró aún más firme en la cancha. Sin dejar de atacar mantuvo a raya a los argentinos quienes paulatinamente degeneraron su accionar a jugadas precipitadas que felicitaron la marca del Tri.
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