ARDUA Y EXIGENTE, LA METAMORFOSIS DE LA CANCHA “ARTÍCULO TERCERO”

Meses antes de que arrancaran los Juegos Centroamericanos y  del Caribe “Veracruz-2014”  todo era euforia. La revisión de espacios para dar cabida a los atletas, equipo e implementos  de usos diversos, se hizo necesaria.

Para entonces la cancha de la escuela preparatoria “Artículo  Tercero” estaba muy por debajo de las exigencias como posible sede  de entrenamiento. Su espacio de juego era zona árida, rodeada de un tupido herbazal, convertido en el hábitat perfecto para víboras y roedores.

ASÍ LUCE la cancha preparatoriana cuya operatividad está a cargo de Delfines de Xalapa.

Los hombres de machete, quienes en ese entonces podaron el área, afirmaron haber encontrado algunos plantíos de marihuana.

Era un terrorífico cuadro.

Fue entonces cuando la visión de la dirección de la preparatoria  –turnos matutino y vespertino—dio en comodato el espacio a la escuela de futbol Delfines de Xalapa que encabeza Héctor Hugo Arellano.

La encomienda era titánica. Se presentó un proyecto en el que se contempló un beneficio  del desarrollo institucional  con un plan estratégico.

Al tomar la parte operativa Delfines de Xalapa, con una buena comunicación con los directores de ambos turnos, se elevó el nivel de uso.

 La operación brindó  un espacio digno, como nunca antes  en la historia de la institución se había registrado.  

TRABAJOS

Los trabajos iniciaron después de obtener el permiso correspondiente.  Lo primero fue la reposición de pasto.  

Se mandaron a hacer porterías nuevas que reemplazarían a las “arcaicas”, carcomidas por el óxido,  instaladas –dicen algunos– a principio de los años 80. 

Se ubicó  detrás de la portería una elevada  maya. Su altura alcanza casi los 6 metros. Su función es evitar que los balones lleguen hasta el bulevar Diamante.

CADA CUATRO meses el espacio de juego  es fertilizado.

Se  consiguieron 150 láminas para  techar las gradas. Los sanitarios estaban  en deprimente estado. No había drenaje. La entidad albinaranja recibió respaldo de una empresa y se instaló un ducto de aproximadamente 60 metros de largo que permitió la retirada de las aguas acumuladas.

Se transformó el espacio de baños instalándose tazas y lavamanos nuevos. 

Así se dio origen  a lo que hoy es, para muchos, la mejor cancha de Xalapa.

MANTENIMIENTO

Actualmente el mantenimiento es permanente.  Se fertiliza  cuatro veces al año. Se repone el pasto dañado cada seis meses. La limpieza es casi diaria. Están al día.

Durante la época pandémica el espacio estuvo cerrado, pero   los obreros –quienes siguieron cubriendo su sueldo de aproximadamente 8 mil pesos mensuales– estuvieron trabajando en el  mantenimiento  del escenario observando  el estricto protocolo de salud.

En los  24 meses ese personal devengó por concepto de  honorarios una  cantidad cercana a los 200 mil pesos.

Hoy día Delfines de Xalapa utiliza el escenario para sus entrenamientos  solamente dos horas por las tardes.    

Por las mañanas el  estudiantado de la preparatoria realiza  sus entrenamientos. Además se llevan a cabo  las clases paraescolares y otros beneficios que genera el espacio.   

Recientemente se supo que  la dirección de la escuela  ha  convenido y autorizado el espacio a  los responsables  del curso  deportivo “Soy portero” que, extraoficialmente, cobra por cada elemento una cuota que  supera los mil quinientos pesos.

LAS CONSTANTES lluvias han beneficiado la cancha que luce agradable verdor.

Así que el inmueble beneficia a la comunidad estudiantil, promueve la formación de jugadores y a la comunidad en general.

EL DATO

La cancha data desde 1971. Es parte de las  tres hectáreas ubicadas en el antiguo “Ejido de San Roque” que fueron asignadas para la construcción  de las instalaciones ubicadas entre la avenida “Adolfo Ruíz Cortines” y el boulevard  “Diamante”, de la Unidad Magisterial.  

El aspecto que presenta  este espacio de juego  es muy parecido a que tuvo, a principio de la década de los 90, el estadio Quirasco.

EL ESCENARIO de juego podría ser utilizado, sin problema alguno, por cualquier equipo profesional.

Ese escenario fue  considerado  entonces como el mejor terreno de juego del Estado.  El coloso de la calle “Cayetano Rodríguez” fue administrado por el club profesional Delfines de Xalapa, que militó en Tercera y Segunda divisiones.

En ese escenario jugaron planteles estelares  de equipos de Primera División como Tiburones Rojos, Toluca, Santos Laguna, Cruz Azul, Jaguares y la Selección Juvenil de México, reservas del América, entre otros.