Momentos de tensión vivió el atacante del Cruz Azul, Roberto “Piojo” Alvarado, tras el accidente vial en el que a bordo de su camioneta atropelló a un joven que descendía de un microbús.
Fuentes allegadas al Club Cruz Azul informaron que la ambulancia pública llegó al lugar de los hechos y, luego de que los paramédicos constataron que el afectado no necesitaba hospitalización, se retiró.
Sin embargo, testigos agregaron que primero lo subieron (al accidentado) en una ambulancia, pero luego que llegó “el seguro , pudo ser del mismo equipo, llamaron a otra ambulancia; acordaron algo, bajaron al muchacho, la subieron a ésta última y se lo llevaron”. Posteriormente, los celestes también abandonaron la zona.
Alvarado iba acompañado por otro jugador cementero, Santiago Giménez quien constató los hechos. También se mencionó que el zaguero Pablo Aguilar venía con ellos.
Las versiones de testigos aseguran que el joven bajó saltando del microbús sin darse cuenta del arribo de la unidad que trasladaba a los futbolistas.
«Ni se fijó (el accidentado) y lo agarraron en el vuelo. La camioneta venía a velocidad moderada», acotó uno de los testigos.
Tras el susto y seguramente de ponerse a las órdenes de la familia del joven afligido, Alvarado y Giménez llegaron a La Noria para integrarse al grupo que se alista para la vuelta de las semifinales ante el Pachuca, este sábado en el estadio Azteca.