
El delantero quiere “armarla” en el equipo que dirige el “Chícharo” Vázquez;
anotó cinco goles la temporada pasada y quiere más con su nuevo equipo
Por FRANCISCO ALVARADO
Pelar por los colores de la playera «y ponérsela muy bien” es el grito de guerra del ex búho y nuevo jugador de los Cafetaleros de Xalapa Luis Alberto Morales Bretón.
El larguirucho jugador que marcó cinco goles con los Búhos la campaña pasada en la Tercera División es ahora uno de los arietes de los Cafetaleros.

“Lo que quiere uno es jugar y donde le den la oportunidad siempre se va a luchar por poner en alto al equipo”, dijo Morales.
Sobre su experticia con los extintos Búhos (jugó una temporada) comentó que “fue grata. Le agradezco a la directiva, a los compañeros y al cuerpo técnico que me aceptaron y me dieron respaldo”.
Agregó que el llegar a Cafetaleros fue porque él mismo lo pidió luego de no interesarle la posibilidad de enrolarse en otro equipo.
“Busqué a donde me dieran la oportunidad y aquí estamos con todas las ganas de sobresalir”.
¿Por algún momento llegó a pasar por tu cabeza que en Cafetaleros no habría lugar para ti por ser ex búho?
“Por un momento, pero siempre hay que tener en cuenta que a veces uno está arriba y luego puede ser que esté uno abajo, por eso siempre hay que mantener el respeto”.
Luis Alberto negó haber tirado golpes en aquel cada vez más lejano 1º de abril cuando en juego nocturno en la cancha del Quirasco Cafetaleros y Búhos se liaron en tremenda bronca lo que ocasionó la suspensión del juego y varios jugadores sancionados.

“La verdad no (tiró golpes). Como jugador trato de no tener problemas porque el día de hoy estoy aquí y la vida en el futbol da vueltas”.
Por otra parte aseveró que en todo lo que se hace en la vida hay cierta presión y para que Cafetaleros sea del agrado de la afición “se deben tomar las cosas con seriedad, para eso nos preparamos toda la semana y hacemos nuestro mayor esfuerzo en los entrenamientos para salir cada fin de semana a jugar con el corazón y hacer su mejor papel, es para lo que uno está”
DISCIPLINADO
Aunque probablemente sólo fue para la entrevista o para la foto, el espigado jugador se despojó de los aretes que lucía al inicio del entrenamiento. Tras explicarle sobre la disciplina de algunos entrenadores que no permiten los colgantes a los jugadores, Morales razonó y se despojó de los suyos.
“A dónde vas tienes que saber que hay reglas y acatarlas. Si hay entrenadores que van en contra de eso, pues adelante, hay que respetar la idea de cada quién”.
Aceptó que el lucir aretes dentro y fuera de la cancha no es un buen ejemplo para los niños y jóvenes que vienen creciendo en su deseo de ser un futbolista disciplinado, en apariencia y orden, dentro y fuera de la cancha.
“Uno tiene que guardar la imagen de jugador. Lo veo mal (traer aretes) y estoy dispuesto a quitármelos porque hay que pensar en quienes vienen atrás, en las nuevas generaciones”, concluyó.