El astro del Real Madrid recibirá terapia del especialista
Joaquín Juan, quien lo “reparó” antes del Mundial de Brasil
CR-7 hizo una “gambeta” a la prensa al salir en
el maletero del auto para no ser detectado
MADRID, España, 27 de abril.- De nueva cuenta se prendió la alarma en el campamento madridista. Cristiano Ronaldo se fue por su cuenta a una clínica especializada para ser valorado de la rotura fibrilar que presenta y que no le permitió jugar la ida de las semifinales de la Champion League ante el Manchester City.
Afortunadamente para el madridismo la resonancia magnética descartó rotura del bíceps femoral.
Fuentes allegadas a la Clínica Ruber indican que la resonancia magnética reveló que el portugués sufre una microrrotura y será tratado con células madre para regenerar el tejido dañado e intentar estar el próximo miércoles ante el Manchester City, en la vuelta de las semifinales de la Champions.
Cristiano se presentó por la mañana al nosocomio madrileño junto a Joaquín Juan, fisioterapeuta de confianza del basquetbolista Pau Gasol quien ya le trató de sus dolencias en el tendón rotuliano antes del Mundial de Brasil.
La estrella del Real Madrid volvió a ponerse en las manos de Juan, harto de los servicios médicos del club, que encabeza en doctor Jesús Olmo. El jugador, consciente de que había cámaras esperando su salida, no dudó en esconderse en el coche, aparentemente en el maletero.
El técnico de los “Merengues” Zinedine Zidane no sabrá si podrá contar con Cristiano hasta el mismo día que se juegue la vuelta con el City, el próximo 4 de mayo.